martes, 29 de noviembre de 2016

LA MEDIÚMNIDAD Y MISIÓN




Mientras haya quienes busquen y se entreguen a la luz abra personas con una sombra que parecerá seguirlas. Cuando se logre modificar la imagen, de suerte que sea evidente que la sombra es tan solo un obstáculo interpuesto entre ellos y la luz, abra un renacer en el desarrollo personal y un despertar del alma en su luz.

 

      LA MEDIÚMNIDAD Y  MISIÓN

 

Era una hermosa mañana de sol y había salido al jardín para relajarme y meditar, coger fuerzas y continuar con la labor diaria. No había empezado con la relajación y suena el teléfono, era Vea, una compañera del centro espiritual que llamaba pidiendo ayuda para una mujer muy necesitada que ya conocía de algún tiempo atrás, se sentía muy mal y me pedía si la podía atender. 

Le indique que podían venir que las esperaba.

Dejé todo lo que estaba haciendo y al poco rato llegaron,  aquella mujer que acompañaba a Vea  ya la conocía, la había visto un par de veces.

Me relaje, pedí ayuda, cerré los ojos para visitarla espiritualmente y pude ver que estaba completamente turbada y poseída. Videncié  su entorno y vi a su alrededor a su madre que todavía estaba en materia y con la cual le iban mal las cosas.

–Le pregunte si tenía problemas con su madre que veía como una contrariedad.

–Me indicó que sí, Antonia –que así se llamaba–. Se había quedado sola, su madre  cada 15 días iba a la casa de un hijo y con ella tenía muy mal vivir.

Me indico que ella estaba en tratamiento psiquiátrico y en aquellos momentos estaba sometida a un tratamiento químico fuerte, en su bolso llevaba –que me enseño– un amplio surtido de medicamentos que tenía que ir tomando a lo largo del día.

Comprendí que necesitaba una atención mayor la mujer que visitaba y las lleve a las dos mujeres a la sala en donde hacía el trabajo mediúmnimico para que hubiese más intimidad, volví a hacer una lectura y la vi acompañada, le hice una limpieza y aquél ser que estaba  a su lado se retiró y Antonia entro en un estado de llanto y tristeza.

El espíritu que la acompañaba era una hermana suya que había fallecido de cáncer unos años antes. Interfería para que Antonia eliminara aquellos resentimientos que tenía con su madre y hubiese un acercamiento en lo humano, en aquellos momentos que la madre se había quedado sola.

Aquella manifestación la recogí mentalmente. También pude comprobar que aquella mujer que visitaba tenía un buen caudal de fuerzas psíquicas y mientras no le diese una salida se iba a encontrar aprisionada y mal.

La limpieza que le había hecho espiritual y un simple comentario de su situación y realidad despejaron y relajaron a  aquella buena mujer que se fue sintiendo más consciente y alegre.

–Antonia me indicó que iba a tener un acercamiento  con su madre que por problemas con otro hermano la había llevado a una total separación.

Envuelta en gratitud Antonia saco la cartera y dinero de su interior para pagar los  servicios.

–Le  indique que la manera de pagar era ayudando a los demás, que ella tenía capacidad para hacerlo, además era su misión, en una entrega de caridad al necesitado.

Antonia se emocionó y empezó a llorar, me abrazó y besó llena de gratitud. Ya más relajada y con una sonrisa en sus labios y  una expresión luminosa en su cara  abandono mi casa al encuentro de aquella verdad que empezaba a rebrotar  en su corazón.

Manolo Carra

domingo, 20 de noviembre de 2016

LEY DE PROGRESO



Unos días atrás una compañera del grupo de apoyo me indicó del fallecimiento de un familiar, después de un largo sufrimiento. Tenía 55 años  y había fallecido de un cáncer de pulmón. Su madre, mayor,  estaba internada en una residencia en un estado de total inconsciencia. Dada situación y estado no le hicieron saber del fallecimiento de su hijo para no llevarle más dolor.
Acompañado de este familiar me acerque al tanatorio, en servicio de misión. Una semana después se manifiesta esta mujer       –corporal– con su hijo fallecido en brazos, en la reunión de caridad espiritual que realizamos en el grupo.  Los caminos de la vida. Fecha  lectura. 17-11-16.  Como enseñanza viva de una verdad de amor que traspasa lo limitado del sentir humano

LEY DE PROGRESO

–Hermano, se ha manifestado una mujer con un niño en brazos y ha producido una fuerte emotividad; nos podéis indicar algo sobre esto,  si es de justicia.

Es nuestra misión y deseo. Son muchas las necesidades materiales que hay en el mundo terreno en el cual se desarrollan los acontecimientos de las pruebas humanas. Esta hermana  que se ha manifestado con su hijo es –terrenal– no se pudo despedir de su hijo y le fue permitido que lo recogiera. Como enseñanza de amor, en gratitud y cariño.

 –Sí, yo con este instrumento que utilizamos he ido a este entierro, del hijo de esta mujer –ella todavía vive– está internada en una residencia allí lleva muchos años y no reconoce a nadie, esto dicen.

Son muchas las necesidades que hay y aunque os parezca lejana la parte espiritual estáis viviendo también en espíritu. Esto, aunque  vuestro campo consciente no lo comprenda; estáis atados a una cadena de progreso que no podéis salir de ella, tanto si tenéis fe como si no la tenéis. Es la fuerza de la vida que determina, es la ley de progreso que eleva el sentir y abre puertas en el camino que como seres de luz que sois tenéis que seguir. En ello está la entrega humana y el logro de vuestra felicidad en el plano terreno en la aceptación de la verdad, que por mucho sufrimiento que haya en la tierra siempre hay una zona de luz en donde se cobija el espíritu y le da fuerzas a vuestra conciencia para seguir aquél camino que todos tenemos que hacer, hombres y espíritus.

–Esta hermana está en una total parálisis y no reconoce a nadie, así lleva muchos años.

Esta hermana está viviendo en el mundo espiritual y para ella es la unión familiar la que se manifiesta, en un plano en el cual no tiene una conciencia clara. Pero debía hacer esa manifestación como enseñanza de amor a otros hermanos.

– Yo cuando voy a ver a esta hermana me dicen que no conoce a nadie, yo le hablo, siento su respuesta interior, y  me queda mirando, intuyo que me conoce.

Los humanos os envolvéis en un ego por falta de conocimiento y os dejáis llevar por aquello que determinan los sentidos corporales. La vida espiritual se agudiza cuando la materia se debilita; al debilitarse la materia el campo espiritual supra consciente adquiere una mayor fluidez y los órganos más debilitados tienen una nueva  posibilidad desde la frecuencia superior del espíritu. Marcháis del mundo terreno en total claridad con una visión clara,   es lo único que os lleváis del mundo material.

– A mi me perece que aquella hermana no se puede expresar pero ella nos conoce.

Independientemente y en beneficio del progreso todo va envejeciendo en el desarrollo corporal, se renueva al tomar materia, seguís el desarrollo y cuando complementáis la misión de trabajo os volvéis a marchar. Hablamos en genérico; mayormente para estos hermanos que ya sin cuerpo –pues algunos han sido incinerados– siguen viviendo como si estuviesen en la vida corporal.

Nada de lo que sucede en vuestro mundo terreno es puesto por un ser maléfico que os quiera hacer daño, todo sucede por una ley del Creador y todo lo que tenga que pasar por el sacrificio humano es necesario aceptarlo para que se manifieste aquella luz, aquél cambio que abra las puertas en aquél sendero que tenéis que seguir. Pero cuando la mente humana se aferra a lo temporal de la materia el sufrimiento acondiciona en todos los sentidos

Nuestro  deseo que os abráis con amor al frescor del alma, para que haya un renacer en vuestra biología, lo mismo que sucede en la naturaleza en cada ciclo de su desarrollo. Dejar brotar esa luz que ilumina vuestra alma y encontrareis el camino en vuestra misión terrena. 
Espíritu Francisco