domingo, 30 de septiembre de 2018

En las reuniones

 
 
Mientras haya una parte anclada en lo humano, no esperéis entrar en la totalidad de lo que es perfecto y lo que no. Simplemente aceptarlo con amor, en las atmosferas del ser humano.
EN LAS REUNIONES
Aparte del trabajo que realizo en mi centro espiritual desde hace más de medio siglo, también acudo a otros centros para recibir y dar ayuda. Y, ayer en el centro espiritual M_R, en el cual solamente nos reunimos médiums y videntes que nos entregamos como herramientas en servicio terreno a formar los campos fluídicos a través de los cuales circula, en este caso –pues también por ellos circula la negatividad– la proyección de la sabiduría divina para un despertar de nuestra primaria humanidad.
La experiencia que relato la hemos vivido varios médiums, entramos como en una nebulosa en donde resaltaban cambios que en la historia de la humanidad desconocemos. Transmutaciones que ha tenido la tierra en el correr de los siglos terrenos, manifestaciones de culturas y dogmas que se manifestaron en ese correr del tiempo de los cuales han quedado algunos eslabones sueltos, que hoy, con las nuevas tecnologías nos ayudan en nuestra misión de progreso. Nos empuja a continuar en bien de la liberación  de nuestra humanidad, ya que nos estamos encontrando con vestigios,  eslabones sueltos, que están unidos a nuestro sentir en tiempo lineal.
Se manifestó una zona que diferenciada estaba en la unidad, en ella había unos seres menudos, cabeza redonda y en los ojos llevaban como unas luces blancas muy potentes, parecían linternas. Comprendí que eran guías extraterrestres. Hubo una fuerte reacción fluidica en los componentes de la reunión, luego entramos en un estado de profunda paz, una luz transparente lo invadía todo,  un vaho  salía de nuestro interior y se vitalizaba en la totalidad, un estado de felicidad me embargaba. Mi mente todavía consciente debía estar buscando explicaciones, siento que me dicen –sin voz– mira hacia arriba, eleve la cabeza con los ojos cerrados y una pirámide de luz subía, todo se convertía en luz. Sentí el deseo de entrar en la totalidad y saciar mi sed en lo humano. En ese momento se fue la visión, comprendí que no era el momento de entrar en la totalidad, sentí un temblor en mi cuerpo producido por una extraña emoción que arrancó lágrimas de lo más profundo de mi sentir. No estaba en trance, recibí la lección por clarividencia, yo prefiero la clarividencia, ya que en ella mantengo un estado de total lucidez que me reconforta, con el trance pierdo conciencia…, lo grabo… para luego escuchar. Manolo