Amanecer en el alma
Es bello, hermoso el despertar
cuando salimos de las noches terrenas y aprendemos a dejar en la inercia del
cuerpo todo nuestro negativo pensar, nuestros egos e insanas pasiones y deseos que
oscurecen el sentir y someten nuestra vivir a las tormentosas pruebas terrenas.
Nuestro despertar en el alma
por mucho dolor que haya en las vivencias terrenas, siempre a través del sueño
del cuerpo nos libera, nos envuelve en un bello y diáfano despertar que nos
saca del letargo de las sombras terrenas y de las dolencias corporales. Pone
energía y fuerza, luz en los caminos de la vida para que sigamos la andadura,
aprendamos en el sendero material que como espíritus en misión de luz venimos a
desarrollar las pruebas en los duros caminos de la vida.
En nosotros, en nuestra entrega
está el despertar, llevar con amor por los caminos de la vida nuestra misión
terrena aprendiendo a compartir, aceptar, amar la temporalidad y convertirla en
luz, dejar en los caminos de la vida las enseñanzas del alma surgidas en el
despertar a través de las noches terrenas.
A todos los que en sintonía de
continuidad y amor vivimos el desarrollo espírita unamos nuestras fuerzas en
bien del despertar del alma. En un abrazo
de amor unidos en la fraterna unidad elevemos
el sentir en donde se limpia y purifica toda la negatividad humana.